Cuantas soledades faltarán para descubrir que no estoy sola, que no estás solo y que… siempre hemos existido. No lo sé, quien sabe dicen las mexicanas decía mi amigo francés. Pues quién sabe, seguiré esperando la respuesta entre viernes y soledades.
La vida demanda seguir, quien se detiene por naturaleza muere, así que no puedo esperarte, pero confío en que te encontraré a mi paso.
Forma parte de este “paso” el sentir la realidad, las necesidades y dolencias de nuestra sociedad. No es posible dolernos de nuestra soledad -muchas veces construida- y pasar por alto las dolencias de quienes no tienen forma de llegar a sentirse solos; porque nunca han estado acompañados o de quienes su bagaje cultural no les ha enseñado TEORICAMENTE el término soledad.
Si crees que la educación es cara prueba con la ignorancia, reza una frase que leí en algún momento y que lo compruebo día a día.
¡Necesito! Hacer algo por educar esta sociedad. El origen de los males que nos aquejan es fruto de ella y no podemos quedarnos tranquilos por ser parte de una élite que tuvo acceso a la educación.
Aunque parezca que acudir a una escuela y recibir educación es lo “normal” basta con salir un poco de nuestra burbuja para darnos cuenta que NO es así.
Hay miles de personas que ni siquiera aspiran a formar parte de las aulas, por lo menos no más allá de la primaria. En muchas familias, cuanto el niño logra MAL leer, los padres lo dan por suficiente para sobrevivir. Le cortan las alas persuadiéndolo que esa es su realidad, que ellos no pueden aspirar a más.
Ojalá sólo sembraran el sentimiento de inferioridad, que es muy malo pero no se queda ahí, ese sentimiento de inferioridad les siembra odios contra el resto del mundo, como si el resto tuviera la culpa de que ellos “tengan” que vivir para siempre así, como si les doliera la felicidad de otros. Y los entiendo ¿por qué ellos no? Es una reacción negativa pero comprensible.
¿Qué podemos hacer? Quejarnos de su resentimiento, puede ser, pero no lograremos nada. Si hemos tenido la fortuna de recibir más que ellos, estamos obligados a DAR mucho más que ellos.
Los problemas son muchos: el primer obstáculo como lo mencioné anteriormente, es la mentalidad que se siembre desde niños. Para trabajar en ello, el cambio será lento y hay que atender elementos periféricos.
La educación pública es deficiente en la ciudad y a veces hasta “contraproducente” en las rancherías. No quiero generalizar, pero hay que reconocer las grandes anomalías en nuestro sistema educativo.
La raíz y solución de los problemas de la nación, están en manos de una mafia que busca poder y nada más. A los ranchos se van los profesorcitos que no tiene plaza, que muchas veces ni profesores son, pero les ofrecen el trabajo y lo toman. Sin vocación, interés, ni consciencia de lo que tienen en sus manos. No generalizo, porque también he conocido grandes profesores que les apasiona su trabajo y son conscientes de las vidas que están formando, pero desgraciadamente son muy pocos.
Ahí está el pobre ignorante, compartiendo su ignorancia que recita como cátedra doctoral, esperando hacer méritos para que le cambien a otra comunidad un poco más grande. Esperando el fin de semana (si es que espera el fin) para ir a tomar su cerveza y ver el futbol que le haga hacer más llevadera su rutinaria vida, que para nada es de su interés.
¿Cómo va a despertar el gusto de su alumnado por aprender? ¿Cómo va a poder transformar su realidad? ¿Cómo va hacer caer en la cuenta a los padres, de la importancia de que sus hijos reciban educación?...
El profesorado es una de las clases más privilegiadas en el país. Efectivamente gozan de prestaciones que ya las quisieran muchos trabajadores y no dudo que siga siendo poco. Estaré a favor de sus luchas por aumentos y prestaciones!! Si el profesor tiene una buena calidad de vida; podrá trasmitir más a sus alumnos.
Pero no se trata de cantidades de plazas sangrando al país, necesitamos un nivel exigido en todos aquellos que aspiren a influenciar la vida de los mexicanos. Profesores de vocación, preparados y comprometidos con el desarrollo del país. No formadores de masas que lo único que saben es hacer marchas y manifestaciones, sin enseñar jamás que hay que DAR para poder exigir.
Que triste que la educación privada sea NECESARIA cuando tenemos un gran presupuesto para educación. Que triste que las familias hagan un gran sacrificio por mandar a sus hijos a la escuela y lo que obtienen es una formación deficiente.
El alumno no tienen la madurez para saber el daño que se hace y el tiempo que pierde, los profesores están ahí porque si no les descuentan el día, los papás creen que cumplen con mandar al niño a la escuela y lo demás es responsabilidad del profesor.
En ese cuadro que se repite todos los días en gran parte de las familias mexicanas; el cambio está muy lejano, si exigiendo las cosas andan lento, solapándolas el cambio NO se dará.
¿Pero cómo va a suceder ese cambio? Cómo despertaran los padres de familia a la realidad, a la responsabilidad que tienen y la obligación que cae en ellos de exigir a los profesores calidad en sus aulas.
Estamos bombardeados de medios de comunicación que lo que hacen es “entretener” olvidando su misión es “informar, educar y entretener” dónde queda su obligación formadora. Ni siquiera es necesario sacrificar ganancias, basta con tener un poco de compromiso y responsabilidad social, darse 5 minutos más en la planeación de sus programas, que casi puedo asegurar; les aumentaría sus ganancias.
Ahora la televisión es la formadora de hogares. Televisa es una mafia que le interesa mantener al pueblo mexicano hundido, reforzar su sentimiento de inferioridad con sus novelas irreales y que les hacen creer “que bonita vida LA DE LOS RICOS, pero no aspires a que sea así la tuya” no pienses en nada, sólo consume lo que te digo. Toma tu partido de futbol, ve por tus cervezas y FESTEJEMOS el día del TACO, es… deprimente.
TVazteca, no escapa de su plan comercial manipulador, no es la televisión que necesitamos, pero por lo menos veo una preocupación mayor en el diseño de su programación. Se sientan esos 5 minutos a pre producir y aportar, aunque sea de manera caricaturizada y ligera, pero aportan. Se ve un interés por lo menos en cubrir algo de esa misión formadora.
No puedo llegar a darles a las señoras libros o decirles escuchen radio temática y no sólo musical. No lo harán, no les interesará, pero por lo menos “cambien sus novelas de televisa por las de TV azteca”. Por lo menos se enterarán que hay programas de gobierno, que hay males en el medio ambiente que urge solucionar, que existen derechos humanos, que la mujer debe ser tratada con respeto, que… cualquier tema que toquen, si por lo menos logran que se enteren de algo nuevo, con eso me doy por ahora.
No me importa si su equipo técnico es menor al de televisa o si la inversión en sus producciones son inferiores. Su contenido es mayor al de televisa y no por bueno, sino porque televisa es nulo en contenido.
Lo que callamos las mujeres- y otro programa que va antes o después no recuerdo- los aplaudo!! No me pondré exigente, aporten una nueva palabra, cualquier nuevo conocimiento, pero aporten.
Las dos televisoras van al mismo público (aunque TV azteca pretenda negarlo), de alguna manera su televidentes buscan un nivel bajo para poder simpatizar, muy bien, no pido mucho “sólo despertemos algo en quien pasivamente espera del otro lado del televisor”.
Me resulta muy difícil hacer que le cambien a tv azteca, no intento decir apaga la tv (que en México con lástima digo, creo que es la peor televisión del mundo. Sudamérica tiene mucho mayor nivel en contenidos) sólo trato de persuadir ¡por lo menos no veas televisa! el cambio será lento, pero algo se podrá hacer.
Sr. Salinas Pliego: puedo hablar de muchas irregularidades en su empresa, pero prefiero reconocer lo bueno que encuentro; confiada en que poco a poco, si esto es aceptado, el cambio podrá irse dando. Sé que bien podrían evitar el tiempo gastado en sacar la información, nuestro gobierno permite esta carente televisión, por eso agradezco que no lo haga.
A Emilio Azcárraga: sólo deseo que un día de estos se caigan sus equipos satelitales y se incendien sus grandes instalaciones. O que sus acciones se vayan a la quiebra y venda su empresa, lo que sea, pero que mucho ayuda si no estorba.
La educación, Los medios de comunicación – EL CAMPO
El campo es la fortaleza de México, es nuestro valor competitivo y sin embargo lo hemos dejado morir. Las grandes tiendas, los grandes grupos; hicieron que el campesino dejara de trabajar el campo. Es prácticamente imposible sobrevivir con los precios de risa que compran su producto en el campo. Pero que en las tiendas, con una etiqueta y muy limpiecitos; la ganancia es mucha.
¿Qué pasó con la gran fuerza campesina que no sabe hacer otra cosa y que necesitan sobrevivir? EL NARCO fue la solución, cambiaron sus cultivos y los grandes narcotraficantes compran su producción o rentan sus tierras.
Que el narco se expandió en nuestro país y que hay que atacarle, SI. Pero para lograr eso hay que generar los medios de subsistencia de toda esa gente que depende de esto.
No me refiero a los capos, a los que no saben ni cuantos millones tienen. Me refiero al ignorante de Don Juan, que vive en la sierra y que no tiene ni claridad de lo que es la droga y del delito que comete. Lo que sabe es que su familia tiene un taco en la mesa, porque tampoco es que los capos sean almas de Dios y repartan equitativamente las ganancias, pero les da algo para sobrevivir.
El campo necesita reactivarse. Si los precios de maíz, de la caña y otros cultivos se desplomaron, no importa, hay otras opciones. Si las grandes marcas se apoderan del mercado, podemos formar grandes grupos si nos organizamos. ¿Qué necesitamos? Nuevamente el obstáculo más grande, el cambio de mentalidad. ¡Saber que si se puede! Que si no sabemos, lo podemos aprender.
Necesitamos un gobierno comprometido, que apoye a los agricultores, que les impulse y capacite para enfrentar las necesidades que ahora el campo demanda. Pero para eso necesito forzosamente los dos elementos anteriores.
La educación que siembre en el MEXICANO un “sí se puede” y un deseo de superación, la confianza y gusto por aprender y seguir creciendo. Y los medios de comunicación que nos ayuden a mostrarle a México que hay otras opciones, que no se encierren en su casita y su coca-cola en la mesa, que no le digan “si existe pero es sólo para los que tienen” que digan TU PUEDES TENERLO. Con que me despierten la inquietud de la gente basta para que los programas de gobierno sean solicitados.
Es triste ver que muchos de los apoyos no se aplican, aún con el presupuesto asignado, porque la gente ni siquiera se entera. Porque la publicidad de gobierno no llega a su público, necesitamos que se meta en la programación comercial.
Vi un programa de los antes mencionados de tv azteca, de las mini series. Lo vi por casualidad, en mis intentos por cambiarle de canal a mi mamá. A regañadientes pero la hice dejar de ver su novelita televisesca.
Con sorpresa vi que la trama era sobre el cultivo de los berries, del arándano en particular. Con todo el melodrama novelesco de nuestra televisión que a las señoras tanto les gusta. con más o menos drama, pero los agricultores se unieron, la dueña de las tierras con dudas y temor de cambiar el uso de su tierra, los apoyos gubernamentales caricaturizados, pero al final lograron su cosecha de berries. Me sorprendió y me dio gusto que se tocara el tema.
Ahí están los apoyos para los berries. Se está promoviendo en los campesinos de maíz, sorgo y otros cultivos que ya no son rentables, que cambien a cultivos de berries. Se les capacita y se les apoya económicamente, requiere esfuerzo, requiere tiempo, pero de lo contrario se quedarán ahí, con una tierra sembrada de algo que se irá a la basura, porque los gastos de corte no los cubre el precio del producto en el mercado.
El cambio es lento, muchas veces los apoyos se quedan en la clase media y media alta, cuando lo ideal sería que se aprovecharan en la clase baja, pero no los piden!! no saben y si se les plantea no quieren arriesgar, no se sienten capaces de hacer algo nuevo.
Por eso y muchas cosas más, necesitamos cambiar nuestra realidad. Cambiar nuestra educación, nuestros medios de comunicación y reactivar el campo. No es fácil ni será cuestión de pocos años, pero tenemos que hacerlo.
Es más fácil repartir una despensa, aperos de labranza o cualquier paliativo a la crisis económica, pero no sirve para nada más que obtener un voto y mantener la ignorancia que garantiza poder. Necesitamos un México renovado, fuerte y competitivo.
He tenido la fortuna de estar cerca de estos dos modelos de gobierno. Ninguno es el ideal, en nuestro sistema político hay mucho que mejorar, muchos vicios por eliminar, pero comparto mi experiencia, por si esto ayuda a una sociedad que no se conforme y que sea un poco más crítica.
Sé que es difícil pensar en progreso cuando lo que necesitamos es calmar el hambre de ese día, pero no necesitamos pescados, porque no habrá para todos los días. Necesitamos herramientas para pescar.
Estuve viviendo la realidad del gobierno del sur, donde el nivel cultural de su sociedad es muy carente. Se reparten muchos apoyos, una libreta, 200 pesos, 5 láminas, una carretilla… vi y sufrí con coraje el comodismo de la gente que espera al político y pone la mano para que le de algo “y les dan”. Ahí los tienen sentados esperando que el gobierno siga alimentando su paupérrima vida y el gobierno comprando con 100 pesos sus votos.
Viví todo eso, pero no me hizo feliz, no quiero repartir libretas, no quiero ver una sonrisa en la gente sabiendo que ignora que su vida podría NO necesitar una libreta, si exigiera un buen gobierno.
Ahora veo un Jalisco que apuesta al campo, que brinda a poyos y que lucha por cambiar la mentalidad de la gente. Por ver el campo improductivo, modificado en un capo techado de invernaderos, de empacadoras, de centros de valor agregado que permita trasformar los insumos y obtener mayores ganancias.
Veo gente trabajando, luchando por cubrir los requisitos para recibir un apoyo. Que no es fácil, que les requiere esfuerzo, pero que los hace luchar por crecer, que les hará valorar su trabajo y no tirar el apoyo a la basura.
Veo con gran gusto a los EMPRESARIOS que están exportando sus jitomates, berries, flores… esos agricultores que sembraban su maíz y que no veían la salida para enfrentar la baja en los precios en productos del campo ahora con una mucho mayor calidad de vida.
Escucho con gusto las críticas pueblerinas de ese que no tenía ni pa comer y ahora ya se siente mucho porque tiene invernaderos, jaja, la crítica de pueblos tal vez sea más difícil de quitar, pero no afecta, por el contrario, me alegra, disfruto saber que el cambio se está dando.
Si nombro los errores de programas de gobierno, las tardanzas, los requisitos, los desvíos, las preferencias… mil cosas, las hay aquí y en el sur. No tapo el sol con un dedo, pero SI tengo que reconocer que me siento orgullosa de publicar las presas construidas, los apoyos brindados, los agroparques, centros de valor agregado, cooperativas rurales… Que no me sentía orgullosa, aunque lo hacía, de publicar 10 000 despensas, 5000 paquetes de útiles escolares, 1000 cobertores, 700 láminas, 5 borregos…
Tal vez en eso consista que no he tenido la necesidad de renunciar a mi trabajo, que esta vez quiero quedarme, que no importa en que hago, lo importante es ver que el resultado tiene sentido.
Ud. Disculpe, pero tenía que decirlo. Divagué lo sé, pero no puedo decirlo sin que el sentimiento se apodere de mi y me vuelva misericordiosa –que etimológicamente no es otra cosa que sentir con las vísceras –
México, podemos hacer la diferencia!!!
No depende del voto hacia tal o cual partido, dependen de la conciencia social, del cambio de mentalidad y de NO aceptar donativos sino exigir lo que nos corresponde.
Mira mis manos escribieron cosas en la infinita soledad del viernes 24 de abril de 2009
