viernes, 28 de agosto de 2009

cArta XII

12 meses, días, semanas, años, que más da… no sé si decir que todo ha vuelto a su lugar, o que no volverá a ser igual que antes. Que nada volverá a estar en aquel desolado punto de partida. Es que no fuiste fugaz ilusión, fuiste compañero de mis pasos, de los más difíciles, de los más reales, de momentos de fundamentación y no simples recorridos mundanales.

Por eso creo que no te irás, que estás más cerca que nunca, aunque estas líneas deban de cesar su escritura. Aunque mi emoción ya no es la misma al tenerte cerca o mis deseos se olviden de pensarte. Aun así, te quedarás, como lo que fuiste y lo que ERES.

Esa parte de realidad que no había encontrado, está presente y me alegro de que así sea. Doy gracias a la vida por cada una de tus cartas, porque fueron momentos que mostraron la condición de mi alma en cada tiempo. Porque mostraron lo que intentaba ocultar aunque fuera imposible de lograrlo. Porque se guardará más allá de mi memoria este encuentro. Porque pudiste conocer, aunque con enigmático velo, algunas de mis concepciones de lo nuestro, del mundo, de la cotidiana lucha.

Doce momentos, mil emociones y sólo una conclusión: Sé que siento. Que tengo la oportunidad de sentir el mundo y no sólo transitarlo.

¿Tristeza? Por qué habría de sentirla, si hasta hoy no ha habido desilusión alguna, si todo fue novedoso y por demás alentador para mis días. ¿Que hoy se termina? Bah! Patrañas de aquellos que necesitan poseer y atesorar para sentir que permanecen. Yo creo que esto sigue adelante y vivo. Jamás se le ha encarcelado, sigue creciendo y por lo tanto, vive.

Que estoy dejando pasar tu momento, ja, los momentos pasan, de lo contrario no lo serían. Vendrán otros, mucho más, otros que no conozco su forma ni circunstancias, pero serán y eso es lo que importa. Mi pasado, podremos recordarlo por lo que soy ahora, mi futuro, es sólo promesa y aliento para seguir avante, pero quiero este, mi presente, este que te conserva y no, este que aunque a reserva, guarda una sonrisa que recibe, y un adiós por si deseas partir. Una sonrisa que saluda y una mirada de despedida, por si mis pasos deciden ir tras otras huellas. Hay todo en mi, listo para vivirse, dispuesto a convertirse en lo que se requiera, no una historia escrita que de no cumplirse acumula frustración de deseos.

Todo es perfecto, porque ES. Lo demás, la fantasía, la guardaremos para los momentos en que el séptimo arte no cubra las expectativas. Aunque la contemplaremos igual; conscientes de la inexistente realidad que alberga, del deseo de distracción y nada más.Pues bien, he cumplido _diría Bécquer_ mi tarea de escribirte y tal vez tu cumplas la de leerme. ¡Leerme! Ojalá lo hicieras, a veces creo que lees tan bien mis cartas que no queda tiempo para leerme a mí, que te conviertes en victima de mis concepciones de momentos y pasas por alto encontrar mi emociones, realidades, sentimientos, miedos y deseo apaciguados.

12 momentos… el papel concluye, pero la vida seguirá escribiendo.

Un beso.

A todos aquellos que tuvieron interés, calma y paciencia de leer las cartas, Gracias.

Hubiera querido publicarlas en tiempo real (real de lo que llevó escribirlas, no en su momento) pero mi impaciencia era mayor que la de ustedes. Se pueden guardar las cosas por años, pero una vez que se sabe de su existencia, resulta irónicamente, imposible esperar.

Más, cuando descubres que la historia es semejante a tu presente, entonces lees, como intentando descubrir tu futuro. Aunque también descubres que para que sea igual, tienes que hacer las cosas diferentes…tal vez por eso disfrutas su complejidad y te ríes de tu pasado o de tu presente, pierdes nociones de tiempo, sólo vives con admiración y sorpresa cada día. Dicen que la historia siempre la escribe el que gana la guerra… ven a poner el punto final.

P.D. quizás esperaban FECHAS, esas que tanto encontramos en los libros. Tengo presente que de mis clases; recordaba los momentos, analizaba sus efectos en la sociedad, pero jamás memorizaba una cifra, era algo tan irrelevante, tan impreciso… como Bartleby (personaje de Herman Melville), preferiré no hacerlo!

lunes, 24 de agosto de 2009

cArta XI

(Texto suprimido por la época de publicación)


Hay duda en ti… no quería provocarla, pero la fomenté. Lo sé y me arrepiento. No es ese el mensaje que intentaba trasmitirte, de verdad no habría nada que temer, fueron mis incongruentes reacciones las que alimentaron toda confusión.

El mensaje era claro y simple. Como siempre, lo hice confuso y complicado. Pero me alegro, en el fondo es bueno visualizar el final de lo que deseamos para luchar por ello y quitar toda viciosa actitud que oculta la realidad.

Con sorpresa reconozco que no es miedo lo que habita en mí, cómodamente le nombro de esa manera para no responsabilizarme y actuar, pero no lo hay. Me reconozco capaz de enmendar mis reacciones incongruentes, sé que no ha terminado y acepto enfrentar lo que aún falta por SER.

Frenaré por un lapso mis cartas, tengo que ir y ser, dejar de plasmar mis sentimientos en papel para mostrarlos al mundo, a ti, a mí, a lo que fuimos, somos o seremos… iré.

Espero no tardar demasiado, aunque si lo hago, tampoco importa, hay tiempo.

Postescriptum:

Intenté escribir ayer, no pude, no sabía que decir ante la expectante espera.
Soy la más interesada en leer tus cartas ¿qué vendrá? ¿Qué falta por surgir en mí? ¿Me gustará el final? ¿Lo tendrán?

No tengo respuestas a nada, releo cada palabra antes escrita y me sorprenden los cambiantes momentos; las dudas, las seguridades, los temores, los desalientos, las emociones, el cansancio y mis deseos de seguir…

Te confesaré que me sorprendió reconocer confusión en ti, te percibía tan claro, tan resuelto en tus estrategias, en tus acciones… Me rio un tanto de mí, por creer que podrías pasar desapercibido todo, creer que la lucha es de una de las partes, cuando esta incluye a dos, no era congruente, lo sé.

No quiero afectarte, descubro tan claro mis contradictorios mensajes que me preocupa provocar tus dudas. Preferiría un claro silencio. ¿Cómo explicar el mensaje real? Por ahora no sé cómo hacerlo y temo que se quede así, hasta lo que mis reacciones y palabras mostraron. Alguna vez le preguntaron a Beethoven qué quería trasmitir con su música, el sólo respondió “si pudiera comunicarlo en palabras, no haría música” …no sabes como desearía poder hacer música.

Toda nueva historia implica una rendición y nos negamos humanamente a hacerlo. Creo que de ahí los internos conflictos. Pero también descubro que no es verdad, no estoy temiendo el encuentro. Visualizar el posible fin de esta historia me hace reaccionar y ver la realidad, mi realidad, lo que quiero, lo que sucede en mí y las falsas visiones que me empeño por encontrar para no reconocerte distinto a todo.


Quiero seguir, no son reales mis temores. Que cómoda postura decir “tengo miedo” o “no puedo”. “Aquello que no pueden es porque no lo quieren tanto como para poderlo” dice sabiamente uno de los santos que más humanamente viviera y que por ende alimenta mi esperanza.

Tal vez deba detener mis cartas, no han logrado trasmitir más allá de las palabras… No seré yo quien obstruya esto, lo dije tantas veces en mis cartas y triste descubro que si lo he hecho.

Sólo hazme un favor, no facilites mi huir, no lances preguntas etéreas a mi malsana retórica. De ser así, ¡Elijamos el silencio!

martes, 18 de agosto de 2009

cArta X...

¿Cómo logras esto en mí? generar necesidad y paz al mismo tiempo, no lo entiendo. Hay cierta certeza de tenerte que no me apura el tiempo, que siento cada paso y disfruto cada momento.

Esto no es normal, o no lo era. Es algo nuevo, desconocido e incontrolable en mí. No puedo más que dejarlo fluir y permitir el asombro de nuevo en mi vida. Asombro, ese que siempre he pensado tristemente perdido en nuestra época, de repente, vuelve. Siempre hay cosas nuevas y basta con estar despiertos para percibirlas. O es acaso que has venido a renovar todo, que aunque todo había sido visto, ahora toma otro color. Ahora no sólo deambulo por mi espacio, sino que lo vivo.

No tengo respuestas a ninguna de mis preguntas y no entiendo por qué no las busco, pero, por qué he de limitarme al pensamiento, a la razón, cuando el sentimiento envuelve y atrae sin necesidad de ello. Quizás es gracias a la ausencia de razones que el asombro llega y maravilla. Por qué agradecer si es mejor corresponder. Si, es cierto, pero no basta, es tanto lo que aportas que necesito agradecerte como único medio de externar mi exaltada situación, estado, modus vivendis… Gracias por el fuego. Eso explica quizás en resumidas cuentas lo que has venido a aportar, a mi o al mundo, porque lo modificas todo.

Anda, cuéntame qué pasa en ti, ojalá pueda aportarte tan altos sentimientos. Que dicha poder dar un poco de lo que recibo. Tal vez lo oculto tanto que genere dudas y conflictos en ti, me disculpo, sé que puede ser. Pero es todo, esta enmarañada cantidad de sensaciones que me hacen ocultarme al mundo como escudo a mi vulnerable estado.

¿Vulnerable? Si, lo es porque mi razón responde a mis inquisidoras dictaduras, pero mi corazón, a ese inexplorado espacio ¿cómo le direcciono?. Hay consciencia de todo, sé que estoy presente, que no hay riesgo mientras así sea, sólo haré lo que siento, lo que soy. Peligro es estar ausente, lo sé. Pero dame la oportunidad de dudar de ti un poco, quizás lo deseo sólo por demostrar a mi necedad de encontrar pruebas en tu contra, que esta vez no las hay. Así podré agradecer de una vez por todas sus servicios y no desgastar más mi tiempo en atenderle.

Vamos a esperar el veredicto…

viernes, 14 de agosto de 2009

cArta IX...

Me hablaste apresuradamente, como temiendo que tu impulso de compartirlo se extinguiera, te escuché atenta...

(texto eliminado por sugerencia del autor)

Con agrado encontré que tus horas de tranquilidad las compartiste conmigo, por lo menos en pensamiento.

Dijiste muchas cosas; deseos, conceptos, negaciones, intensiones…palabras que no repetiré por no modificar su esencia natural y por lo tanto perfecta. No permití caer en la magia de tus palabras. Te incomodaste un poco, noté impotencia en tu reacción; pensaste que no estaba entendiendo tu oferta y sólo elegiste dar tiempo para que todo fuera más claro. Yo no intente sacarte de tu error, entendí perfectamente lo que dijiste, pero tú querías que interpretara lo que no expresaste literalmente, también lo entendí, pero no acepto interpretar. No confundiré discursos, no sobrepondré mis deseos o pensamientos sobre tu libre sentimiento.

En tu claridad encontrarás la mía. Sé que es difícil, de hecho casi nunca logro expresar mis pensamientos de manera pura, caigo en el juego de la retórica y lo disfruto, pero esta vez no, no quiero un juego de palabras porque en su misma superficialidad se pierde el contenido.

No habrá prisa, tienes todo el tiempo del mundo para que tus miedos se apoderen de ti y cambies de opinión, si así lo deseas. Pero si los vences, si tu intención es constante pese a todo, sé que los dos estaremos contentos de alcanzarlo, el miedo vencido sólo evidenciará la presencia de quién sólo es capaz de romperlos… lo sabes verdad.

Te entiendo y te entenderé, pero caminaremos sobre realidades, no en fantasías, no en engañosas palabras ensalzadas.

No he de negar que mi ilusión ha despertado, que aunque me sobrepongo a interpretarte, lo hago. Hay paz en mi, felicidad, gratitud, calma y claro, miles de suposiciones del futuro. Lo disfruto en mi interior y tranquila sigo mi cotidiano caminar, es sólo la ilusión, camino para conocer lo real. Lo que resulte, será muy bien recibido. No hay condicionamientos ni prisas.

Quieres ser diferente a los miles de transeúntes de este mí andar, yo también lo quiero, por eso no voy a estropearlo, si te interpreto, si te facilito el camino, lo condiciono, sacrifico tu esencia por mi deseo y no quiero eso, te quiero a TI. Completos o no acepto falsos encantos pasajeros. Sé que también lo esperas, lo hago por mí y por ti. Sea cual sea el futuro, ganaremos con este encuentro. Disfrutemos lo que es, que de poesía e ilusiones ya he vivido mucho.

En mis interpretaciones también hay dudas, quizás son ellas las que ayudan a no aceptar precipitar las cosas. Por eso espero la claridad de tus palabras. Eso es lo que espero, encontrarás las mías. ¿Las encontrarás?

martes, 11 de agosto de 2009

cArta VIII

Has superado las expectativas. Me sorprendí cuando hiciste surgir estas cartas por evocarme a Bécquer, sin yo saber que te aventurarías a llamar a mi memoria a Shakespeare. De modo que te atreves a hacerte impredecible…

Me doy cuenta que de esas 4 iníciales cartas, pueden llegar a ser 48 sonetos, 48!! son demasiados, te das cuenta de lo que esto implicaría. Aunque he de confesar me atemoriza menos pensar en una extensa cantidad que en la infinita cifra… aunque no tengo manera ni deseo de definir lo que vendrá.

(Fragmento eliminado por la editorial, pro no corresponder con las épocas de publicación )

...sólo me sorprende tu osada azaña de recordarme tan altas letras.

Cómo te atreves a romper mis esquemas, a escribir tus propios caminos, ¿Qué no se suponía, ya todo estaba escrito? No te basta con mi nobleza de permitir recorrer los caminos pasados, con nuevas oportunidades de ser tuyos y no de otros. Cómo logras ampliar mis territorios y mostrarme los grandes espacios que aún alberga mi alma y que jamás habían sido sospechados siquiera.

¿Quién eres? Ya no me atrevo ni a definirte, a otorgarte un lugar en mi; al fin de cuentas eres tú quien rompe esquemas y va más allá de mis ofrecimientos. ¿Cómo has hecho? Qué divina voz te dicta mis refugios inexplorados, quién conduce tus acciones y palabras para mostrarme tan sorpresivamente lo que soy y que ignoraba.

¿No era yo quien tenía que presentarme, ofrecer mis mejores colores para agradarte e invitarte a mí?. Qué parte tan mía tu eres que adelantas tu paso y paciente esperas despertar a esta, la que soy y tanto miedo tengo de encontrarle. Veo un gran camino, me atemoriza recorrerlo y es tan mío, quizás por eso. Hubiera sido tan simple recorrerte, ser tu espejo y mostrar-te a mí. Pero me paralizas, no lo aceptas, ni siquiera te despierta el interés. Sabes a dónde vas y no temes lo que encuentres, será tal vez que lo conoces.

Agradezco este viaje, no es fácil a la niña temerosa emprenderlo, pero no quiere defraudar a quien en ella cree. Será lento, no quiero girar y salir corriendo antes de dar el segundo paso, pero ya estoy andando.

Lo había sugerido en algunos escritos pasados, sabía que grande era quien te hacía volver dentro de ti. Recuerdo haber enunciado la presencia del amor en quien tales acciones despertaba. Pero no era yo protagonista, sólo dejaba fluir la pluma hacia un sueño de un amor. Que SEGURO era soñar y pintar de perfección, al fin de cuentas no podía atemorizarme, era sólo eso, un deseo ilusorio de algo inencontrable… Y ahora qué quieres qué te diga, has dejado mi escritura sin palabras.

He perdido toda predicción de lo que viene, cómo poder conducir algo que has hecho surgir de lugares desconocidos para mí. Por qué no te mueves en el plano de la razón, ese que tan dominado creía tener. No te entiendo, no tengo definiciones y mira que muchas he memorizado.

¿Qué es aquello que no se define? Tengo algunas nociones de su contestación, misma que he dejado de lado por no tener que enfrentarme a Él, sin respuesta, sin control, sin falsedad. No he de negar, o más bien he de repetir, mi miedo, mi desconocida reacción, mi ignorancia del proseguir, no tengo ni siquiera forma de terminar esta carta… si yo pudiera transcribir esta ¡¿emoción?! No sé ni cómo llamar a todo lo que ahora envuelve mi cuerpo, mi mente, mi alma, mi corazón…has sentido conectarse todo, tus sentidos, tus emociones, tu cuerpo, el mundo ¡¿lo has sentido?!

Si esto que en mi sucede es repetidamente surgido en otros, creo estoy en la antesala de algo magno, que al no conseguir ni los grandes eruditos enunciarlo en letras, llega a mi por la experiencia.

He leído a Bécquer, Shakespeare… incontables autores y resulta que mi admiración se ha hecho nada, tú has resultado el mejor. Cómo llamar a quien no necesitó escribir para emocionar mi alma, mi ser, ese extraño espacio que no logro ubicar pero que hace inundar todo mi cuerpo. ¡¿quién eres?! Terminaré aquí, así abruptamente… no puedo escribir lo que siento.



¡SIENTO!

viernes, 7 de agosto de 2009

CArta VII

Mi ánimo se cansa, tengo miedo. Ya no sé si dejar pasar todo, me cansa la expectativa cuando hay pocas luces de aliento. Me cuestiono mi poco deseo de lucha, mi cómodo desistir y seguir adelante, no importando lo que se pierda. Pero no encuentro aliento en ti, no pretendo crear falsas ilusiones.

Agradeceré tus cartas, las que inspiraste, pues nunca enviaste ninguna.

No CIERRO el caso, no obstaculizaré el natural ritmo, pero poco a poco veo que no existe este, que tenemos intereses distintos. No hay dolor, no hay desilusión ni hay nada en tu contra, sólo desiste mi búsqueda de ti. Serás uno más, aunque intenté contemplarte distinto.

No me gusta ser una, no me gusta los juegos y cambios de ánimo. Mi corazón antes lastimado ya no acepta un segundo plano, un sentimiento ocasional, un corazón con límites.

Sé que hay exigencias en mí, que te ha correspondido cohabitar en una etapa de temores personales, de riesgos de devaluación, de una pretensión mucho mayor, lo sé. No he sido favorecedora de tu buen ánimo, por el contrario cuestiono y exijo. Pero si tan sólo hubiera visto un interés de lucha, mi actitud pudo haber tomado confianza de abrirse plenamente, pero así no puedo.

Perdón, no quiero reclamar, no tengo motivo para hacerlo, sé que mis letras así parecen, pero es sólo un vago intento por manifestar mis temores que me llevan a este punto y hubiera deseado que así no fuera.

Eres importante para mí, formarás parte de mi limitada lista de personajes interesantes. Seremos amigos, lucharé por ello. Hoy sólo te digo que abandono la intención de comenzar una Azaña juntos, una historia que tenga por pizarra el corazón. Hoy eres libre de reír, de ser, de buscarme o de inventarme.Hoy eres como todos. Todos mis amigos claro, a los que estimo y disfruto su compañía, pero que no pueden ir más lejos que mi imagen y mi limitado actuar en sociedad.

Te despido y te doy la bienvenida, hoy cambias de papel, hoy eres nombrado, honrosamente, como un grato personaje en mi vida, con derecho de compartir momentos, sólo momentos.

La gente puede elegir y puede no elegirme, lo sé, no tienes culpas de nada. Sólo me enoja que habiendo querido elegirte, hoy desista de ti. Perdón, pero no me gusta la competencia, necesito la confianza plena, saber que lo que tengo es porque no hay lugar mejor donde pueda estar y no sólo por ocasionales encuentros. Ellos, los que llegan y se van, pueden hacerlo, pero habitan este recinto, donde hoy tomas asiento.

Buenas tardes, con permiso ¿gustas algo de tomar? Yo volveré más tarde…

Postescriptum:
Hoy forcé mi pluma, no fluyó como antes, pero quería concluir esto, no soporto la duda, prefiero descartar que vivir con el temor de querer y perder. Lo sé, es muy blanda mi lucha, debería darme pena. Y yo que hablo del amor, de esa fuerza que mueve al mundo, yo que creo dar todo por él. No soy capaz ni de enfrentar mis demonios.

Como siempre, digo adiós con un gran argumento pero una sola razón, otra vez… tengo miedo. No de ti, no de mi, tengo miedo de perder, de los otros, de mi imagen. Bah! Triste persona la mía que se alimenta de los estándares sociales, esos donde se debe tener todo lo que se quiere y por lo tanto, sólo queremos lo que ya tenemos, somos incapaces de ir por más, de luchar por algo superior, de conquistar!!!

Si sólo admitiré ser conquistada; estoy tristemente condenada a la voluntad de otros, tendré mi seguridad de haber sido deseo y lucha de alguien, pero nunca emprenderé mi lucha.

Que grande ha de ser luchar por alguien, conquistar y saber que tu AMOR es real, que entonces no hay duda, estás plena y tu duda no es duda, pues basta con amar para que el corazón esté dichoso. Ser amados atemoriza, lo sé, lo he comprobado tantas veces… ¡no es verdad! mi temor es por AMAR, no a ser amada, no me puedo seguir engañando. No si pretendo plenitud y si te pretendo a ti.

Que difícil, pero sé que es la verdad, y como todas, no siempre son dulces; pero sin duda llenan más el alma y generan algunas revoluciones, tiene que ser siempre así. Es la única manera de quitar barreras y dejar SER lo que sabemos no tiene otra salida. El ejercito opositor, somos nosotros mismos. pero irónicamente tendrá que declararse vencido por convicción; si quiere ver elevarse a la victoria a su oponente. Si quieren celebrar la GUERRA y no la derrota o triunfo de ninguno.

Mira cómo hay lucha en mí, no sé qué hacer. Tengo miedo de violentar tu paz pero también de no hacerlo y dejar pasar lo que hasta ahora, considero posible…

Hoy, no hablaremos, te dejaré tranquilo y en tu paz, tal vez esta nos falte a los dos para aclarar las dudas, para encontrar las respuestas, para completar las municiones y salir a pelear, ya veremos si contra ti o contra mí, pero habrá una lucha, estoy segura.

miércoles, 5 de agosto de 2009

cArta VI

No somos nada ¿no? entonces por qué mis celos, por qué mi no aprobación de ser una más, porqué exigir mi privilegiado lugar… hay un intrínseco deseo de exclusividad. Me cuestiono si estarás dispuesto a enfrentarlo, a vivirlo. Este es factor fundamental, sola no conseguiré mucho o tal vez sí, pero perdería sentido. Sé que podemos lograrlo, yo quiero hacerlo ¿y tú?

Me alegra que seas paciente, es justo lo que yo no soy, ese puede ser el elemento que sume a mi persona y que consiga el objetivo.

(Fragmento eliminado por la época de publicación)

Encontraste mis cartas, debiste haber sospechado su destinatario, pero al no estar seguro sólo despertó inquietud en ti. Me buscaste insistentemente, acepté tu propuesta pese a mis tareas pendientes, quería estar contigo, por qué cerrarme a ello. Había un sentimiento nuevo en ti, una actitud más natural, más abierta a mostrarte a mí. Quisiste mostrarme tu mundo o por lo menos así lo sentí y lo valoré.

Me regalaste tu lugar de paz, el momento tuvo su magia; encanto que me dio tranquilidad y emoción, lo agradecí ahí. La naturaleza mostró sus colores. Lo contemplamos, pero sin duda los dos intentamos borrar cualquier posibilidad que promoviera nuestros miedos.

Me sentía bien, contigo, sin prisas, sin planes. Se hizo de noche y se nos fue el día entre un lugar y otro… ahora siento el mensaje ¡ese es mi mensaje!. He pasado el tiempo sin decidir “mi vida” por no afectar a otros y el tiempo termina por consumirse para ambas partes.

(Fragmento eliminado por la época de publicación)

Eres inconstante, tus emociones cambian tanto como mis seguridades y miedos. Al otro día te vi y fue ahí que despertaste mis celos, era una más, no me gusta esta posición. No deseo formar parte de una lista, ser un número… por momentos sé que no lo soy, pero en otros temo estarme auto engañando y no querer ver la realidad.

Buscaré mi lugar, por ti y por mí, por no desgastarnos, por no dañar la imagen de amor que corroída se encuentra ya. No es recomendable vaciar los quedos latidos que aún el corazón lucha por dar.

Ha de latir con fuerza y constante o no hemos de fatigarlo.

lunes, 3 de agosto de 2009

cArta V...

Se detuvo la libertad de pensamiento y sentimiento.
Aparecieron los temores.

Es normal, y por demás beneficioso, si se saben comprender. Siempre estarán presentes, de ahí lo importante de poder escuchar sin que esto frene o limite el actuar.

Tranquilizas mi inconsciencia, mi andar sin rumbo. Me enojas, me siembras dudas, después recapacito y me alegro de la oportunidad de tu amistad. Me gusta serlo, tengo que aprender a no necesitar poseer para permitir querer. De repente es evidente mi aún incompleto proceso afectivo, hay fantasmas, creía que no. Soy consciente de muchos errores, pero forman tan estrechamente parte de mi personalidad que salen sin siquiera notarlo. Oculto lo que siento, manipulo lo que pienso…

Respiro… quiero y debo ser YO, hay que romper cadenas, tal vez tu misión es esta, evidenciar lo que aún falta por hacer. Eres un buen elemento, gracias por permitirlo, por provocarlo, por ir delante de lo que yo alcanzo a ver.

Hoy estoy contenta, seremos AMIGOS. Que gran regalo, que oportunidad de SER sin tener que maquillar, prometo estructurar las cosas para que así sean, para aceptar y recibir lo que eres y no para modelar en ti un perfil que deseo poseer. Que triste, eso es lo que siempre había hecho, pero que dicha lo que viene.

¿Qué raro verdad? Si, lo soy un poco, pero mira que gran interés ha de tener Él en mí y cuan consentida me tiene. Va caminando conmigo, de la mano, con paciencia, mostrándome el mundo y resaltando mis errores para que no los repita. Y tú, su cómplice.
Me gusta eso de saberme con un reto, de controlar más no limitar mis emociones, simplemente ser dueña y señora de ellas, no su víctima. Me fueron dadas para lograr mi plenitud, no se cumplirá el objetivo si yo no las asumo como propias, si no me responsabilizo y las direcciono.

Somos cercanos, nos identificamos y compartimos algunos momentos, somos AMIGOS.

Sabes, había resuelto que esa sería mi actitud; admitir al amigo antes que cualquier otra cosa, en la práctica lo había olvidado, ja, ya voy entendiendo y me sonrojo por mi olvido e incumplimiento de mis deseos, pero mira, me lo has recordado…