viernes, 31 de julio de 2009

CArta IV

Me sorprendes con tus detalles… cuando te acuerdas de mí y decides saludarme. Sin motivo, sólo un ¿cómo estás? que a mí me da horas después para seguir pensando-te. Quieres conocer mi mundo, mi gente, mis afectos. Te muestras interesado en todo, compartes mis gustos y mis alegrías, algunos son tuyos también, otros los admites porque son míos.

Eres… ya no sé quién eres, pero habitas en mi. Me cuestiono cómo me concibes tú, qué pasa en ti. No por control o por egocentrismo, pasa que deseo que esta vez el sentimiento sea compartido, pasa que espero una respuesta favorable, pasa que no quisiera perder lo que por alguna extraña presencia lo siento tan mío.

No sé cómo pero lo han notado, he tratado de ser lo más normal a mis días, de no alterar mi mundo, de ir en calma para no confundir las cosas y cómicamente me entero que hay algo diferente en mí. Que no lo noto, pero a los demás es difícil de ocultar. Me preguntan por ti, y al igual que yo; aún no te conocen, pero saben que algo eres. Pero sé que no somos nada, no sé por qué este efecto en mí, no estoy mintiendo, sólo que hay algo en el interior de mi alma que se ha dispuesto a externar un contenido que aún todos desconocemos.

Me cuestiono si es muy pronto, el mundo enseña a mantener los pies en el suelo y la cabeza fría. Sé que es lo mejor, lo comparto totalmente. Eso quiero. Pero los pies en el suelo para que seas REAL y la cabeza fría para ser YO sin temores, sin extrañas concepciones de lo que no has dicho. Lo trato, pero no es simple. De repente quiero soñar, mi mente viaja e imagina, me es difícil desistir de ello, pues envuelve. Sólo tu saludo, tus mensajes o tu voz, me hacen regresar y preferir quedarme en esta, MI REALIDAD.

MI REALIDAD!!! Que extraño, ahora resulta mejor que mis novelas, mis frases, mi poesía… quizás mi vida me parece un poema.

Has sabido hacerte presente de manera magistral. Diste la tarea sutilmente cargada de un sano recuerdo tuyo. Por ahora me resulta difícil olvidar cumplir, pues te recuerdo, y sabes… una sonrisa de complicidad queda en mis labios al dar los primeros pasos y caminar a mi destino.

Por qué mi corazón se siente poéticamente acompañado, por qué no lo asocia a momentos de soledad y nada más. Has roto las barrearas entre mi ilusión y mi realidad, traes elementos anhelados pero que asociaba a lo irreal. Tienes lo real tan sanamente apropiado, tan hecho tuyo que toca la línea de la fantasía…

Ya no sé si escribir o detenerme a sentir, pero quiero plasmar esto, mi mente tiene palabras como dictadas por un ser divino, yo sólo permito que fluyan, no seré yo, y espero que nadie, quien obstruya el curso natural de la vida, ese que algunos denominan –Amor-.

No hay comentarios: